-
Lorca y Diseminados de la Huerta
Se realiza el sistema de recogida y transporte de las aguas residuales del casco urbano de Lorca, su huerta y las pedanías de La Hoya e Hinojar, El Consejero, Los Canales, Los Cautivos, La Torrecilla y Purias, conduciendo las aguas hasta la EDAR La Hoya.
-
Pedanías Altas
Se realiza el sistema de recogida y transporte de las aguas residuales de las pedanías lorquinas de Coy, Doña Inés, La Paca, Zarcilla de Ramos y El Rincón conduciendo las aguas hasta la EDAR Río Turilla.
Aparte, las pedanías Zarzadilla de Totana, Avilés, Las Terreras y La Parroquia disponen de EDAR propia.
-
Pedanías Sur
Se realiza el sistema de recogida y transporte de las aguas residuales en los núcleos de población de Almendricos, así como en parte de Los Jopos y La Campana, hasta las EDAR propias de cada uno de los núcleos.
-
Pedanías Costeras
Actualmente se está ejecutando el sistema de recogida y transporte de las aguas residuales de los núcleos de población y pedanías lorquinas de Ramonete, Librilleras y Los Curas, e incluso próximamente la zona de Puntas de Calnegre, hasta la EDAR Río Turrilla.
La red de alcantarillado de Lorca tiene una longitud de 410 kilómetros. Dispone de 9.178 pozos de registro y 10 estaciones de control de aliviaderos
Aguas de Lorca incorpora los últimos avances en su área de actuación para realizar una gestión responsable sobre la red de saneamiento y proteger el medio ambiente. Para ello realiza labores de mantenimiento para la prevención de incidentes, con control de elementos contaminantes en el agua residual urbana, la inspección interior de las conducciones, el diagnóstico del estado de las redes, la prevención de inundaciones para evitar daños a terceros, urbanísticos o ambientales y la prevención de los vertidos incontrolados al medio.
Control de vertidos
El control de vertidos es el conjunto de acciones encaminadas a identificar y caracterizar los vertidos que se realizan a la red de alcantarillado, con el objeto de proteger los recursos hidráulicos y el medio ambiente, así como garantizar el buen funcionamiento de las instalaciones de depuración y de alcantarillado, retornando los efluentes al medio natural, de forma que no se impida su aprovechamiento una vez depurados, así como de los subproductos obtenidos en los procesos de depuración.
El vertido puede ocasionar la degradación de las tuberías e impedir el adecuado funcionamiento de las estaciones de tratamiento de aguas residuales. Para evitarlo, se realiza un continuo control y seguimiento de la contaminación aportada por el tejido industrial y se garantiza que los vertidos se realicen cumpliendo la normativa vigente.
Aguas de Lorca, a través de sus equipos móviles, realiza el control de los vertidos (domésticos e industriales) a la red de alcantarillado basándose en dos tipos de actuaciones fundamentales:
- El control de vertidos realizados a la red de alcantarillado por las diferentes entidades conectadas al mismo.
- El control de la calidad del agua residual que circula por los colectores de la red de saneamiento con el fin de identificar las zonas de la red con mayor aporte de carga contaminante.
Dichos equipos se pueden mover, según las diferentes estrategias operativas, entre los puntos de control de red y especialmente diseñadas para la toma de datos y muestras de agua residual.